Oculto
La noche se aproxima inevitable mi alma se muere, se siente sofocar mil espinas clavadas en mi pecho camino que no puedo dejar atrás. Es tan difícil no voltear la mirada para no convertirme en estatua de sal. Cabalgata nocturna por el mar, caretas que esconden lo que callas, es este mensaje que no te debo dar. Quizá esta amargura nunca pase como las aguas del río que se van. La inmaculada flor que de mañana empapada esta con gotas de rocío es prueba fiel de que no te olvido. Cumplo así de esta mi promesa de olvidarte nunca, pero nunca jamás, y a la hora de la muerte amarte aún más.